Realmente tu vida tiene un sentido, tiene un propósito. Yo creo en la palabra de Jehová y esta me establece que a los que aman a Dios todas las cosas les ayudan a bien, por lo tanto, cada situación que pasa en tu vida es porque ÉL así lo ha establecido.
¿Sufres? No sufres porque Dios no te ame o te quiera ver sufriendo, sufres porque el sufrimiento de tu vida te ayuda a madurar, a ver las cosas desde otro punto de vista, sufres porque al sufrir, entiendes a todos aquellos que están sufriendo y en algún momento de tu vida los podrás ayudar, además, sufres para que puedas recordarte que no estás solo y que no puedes vivir solo, sino que necesitas de Dios para que te de FELICIDAD.
¿Amas? No amas para sufrir sino que sufres para amar. Amas, porque Dios te ama y te hizo a su semejanza, por eso te enseñó a mar, para que lo ames a ÉL, para que te ames a tí mismo y para que ames a aquellas personas que colocó a tu lado. Tu vida se basa en el amor, Arriésgate, no lo pienses más, AMA, vive tu presente y te gozarás de tu futuro.
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